Se lleva hablando un tiempo del tope al gas y desde Eres Energía queremos explicar cómo funciona este tope y ver si realmente está funcionando y está bajando el precio de la electricidad.
Antes de empezar, aclarar que el precio de la electricidad lleva otros conceptos como los desvíos o costes de emisión del CO2 y que no los vamos a tener en cuenta para simplificar la explicación.
Sistema marginalista
El mercado eléctrico está basado en un sistema marginalista, donde todas las fuentes de producción (eólica, solar, nuclear, carbón, hidroeléctrica, etc…) cobran el precio de la última que entra. Si la última que entra es el gas/ciclo combinado y entra a 200€/MWh, el 100% de la energía producida se paga a 200€/MWh.
Mecanismo del Tope al Gas
Cuando se valoró la opción del tope al gas, la idea era que las fuentes de producción má baratas no se beneficiaran del alto precio del gas. Se decidió poner un tope al precio máximo que pueden recibir estas fuentes de producción distintas al gas (50€)
Por tanto, si el 25% de la energía se produce con gas, el 75% se pagará al precio de la última fuente en entrar (o como mucho la del precio del tope al gas a 50€) y sólo ese 25% de gas se paga al precio del gas. Si necesitamos 1MWh, el 75% se pagaría a 50€ y el 25% a 200€, lo que nos daría un precio final de 87,50€/MWh.
¿Ha funcionado el Tope al Gas?
En principio todo parece perfecto, y en teoría nos ahorraríamos bastante dinero… el problema ha llegado por dos motivos:
- Francia está importando muchísima electricidad de España (ya que nuestro precio es mucho más barato que el suyo). Además, tampoco hay mucha renovable funcionando ahora mismo, y en vez de usar un 25% de gas estamos usando un 45%… y ese es el porcentaje que hay que pagar a precio de gas.
- Por otro lado, el precio del gas ha subido muchísimo (pongamos que ahora hay que pagarlo a 350€), con lo que ese 45% de gas que se usa para producir electricidad es mucho más caro.
De esta manera, un 55% se está pagando a 50€ y un 45% a 350€… muy lejos de lo que se había estimado. De forma, tenemos un coste final de 185€/MWh.
En resumen, el tope al gas ha hecho que baje un poco el precio de la electricidad, pero no tanto como predecían algunos, en parte por el altísimo precio que está teniendo el gas.