Aprovechando la celebración del Día Mundial del Turismo, que se celebra anualmente cada 27 de septiembre, hoy queremos mostrarte todas las posibilidades que ofrece el patrimonio eléctrico como elemento ideal para la puesta en marcha de propuestas de turismo diferentes y sumamente atractivas.
En este sentido, en los últimos años se están desarrollando iniciativas más que interesantes a la hora de garantizar la conservación y puesta en valor de diferentes instalaciones eléctricas que, por diversas causas, forman parte de nuestro patrimonio.
En este sentido, no solo nos estamos refiriendo a aquellas que se encuentran actualmente en funcionamiento y que constituyen auténticas joyas de la ingeniería industrial, sino también a instalaciones que se encuentran en desuso, pero mantienen un estado de conservación admirable, o en las que se están realizando los trabajos necesarios para mantener su incalculable valor histórico, arquitectónico e industrial.
Esto está dando lugar a la aparición de un creciente interés por el desarrollo de propuestas turísticas dirigidas a dar a conocer estos espacios, sumamente interesantes para entender nuestro pasado y, muy especialmente, la espectacular evolución desarrollada a lo largo de las últimas décadas en el ámbito del sector eléctrico.
Hay que tener en cuenta que una gran parte de estas instalaciones eléctricas históricas se encuentran enclavadas en un entorno natural o rural de gran interés, dadas las técnicas utilizadas durante los siglos XIX y XX para la extracción de energía en saltos de agua, corrientes fluviales o, incluso, minas que, desde hace décadas, se encuentran fuera de servicio.
Dentro de este interesante y numeroso patrimonio consideramos preciso destacar la posibilidad de visitar La Fábrica de la Luz – Museo de la Energía de Ponferrada, inaugurado el 14 de julio de 2011 en las antiguas instalaciones de la central térmica de la Minero-Siderúrgica ubicada en esta localidad leonesa, que permanecía cerrada desde el año 1971, por lo que precisamente este año cumple medio siglo desde este hecho y celebra sus primeros 10 años desde su transformación y reapertura.
Este edificio, que ha recibido numerosos reconocimientos tras su recuperación y transformación en un espacio lúdico, como el ‘Premio Europa Nostra’ a la Conservación del Patrimonio Cultural de la Unión Europea, ofrece un interesante repaso histórico de la importancia del carbón en la producción de energía, con el fin de transmitir a los visitantes la influencia social que tuvo esta industria, durante décadas, en una zona como la Comarca del Bierzo.
Como puedes observar, a través de propuestas relacionadas con el turismo como esta, lo que se trata es de ‘poner luz’ en un aspecto esencial de nuestra historia, dada su influencia capital que tiene la electricidad en nuestro actual desarrollo a todos los niveles, pero sobre todo a nivel tecnológico, cultural y social.