Una vez que en anteriores publicaciones en este blog hemos centrado nuestra atención en aquellas medidas que puedes llevar a cabo para reducir el consumo energético de tu cuarto de baño y tu cocina, hoy queremos reflexionar contigo sobre cómo incrementar tu eficiencia y ahorro energético en el resto de estancias de tu vivienda, como son el salón y los dormitorios.
En este sentido, si bien es cierto que la mayor parte de tu consumo energético diario se realiza en las dos estancias sobre las que hemos tratado anteriormente, también es conveniente que tengas en cuenta qué puedes hacer para mejorar tu eficiencia energética en aquellas otras en las que pasas el resto del día, tomando como referencia los consejos que te mostramos a continuación:
- Aprovecha al máximo la luz natural exterior, ya que además de ser más saludable para tu organismo, te permitirá reducir tu gasto eléctrico en iluminación. Además, el hecho de mantener las luces apagadas durante más tiempo también influirá en que estas no contribuyan a incrementar, aunque sea levemente, la temperatura de la habitación.
- Tanto en el salón como en los dormitorios, será conveniente que realices un consumo responsable de tus aparatos de climatización, y muy especialmente si dispones en ellas de sistemas de aire acondicionado o calefacción. Ten en cuenta que la temperatura ambiental más adecuada y eficiente será aquella en la que la estancia se encuentre entre 24 y 26 °C en verano y en torno a 22 °C en invierno.
- En sustitución de estos dispositivos, que requieren de un consumo y potencia mucho más elevado, podrás optar por realizar una correcta ventilación de tu vivienda, o por usar otros aparatos eléctricos con un menor consumo y potencia, como es el caso de ventiladores o radiadores eléctricos de bajo consumo.
- Del mismo modo, puede ser una buena idea sopesar la instalación de termostatos inteligentes, para que el control de la temperatura ambiental se ajuste realmente a unas condiciones establecidas previamente, y no a tu percepción personal en cada momento.
- Asimismo, recuerda utilizar regletas y temporizadores eléctricos para controlar tu gasto eléctrico y, sobre todo, para reducir el ‘consumo fantasma’ de tus dispositivos eléctricos, apagándolos totalmente cuando no tengas previsto utilizarlos.
- En el caso concreto de tu dormitorio, aunque también puede ser aplicable al menaje de tu salón, será conveniente utilizar la ropa de cama más adecuada para cada estación del año. Así, reducirás tu necesidad de mantener activados tus sistemas de climatización durante la noche.
- Para finalizar, solo nos queda recomendarte que consideres las ventajas de utilizar lámparas en tu mesita de noche, ya que requieren de un menor consumo energético, y que, si eres de los que te gusta dormirte viendo la televisión, no olvides nunca activar el modo ‘apagado automático’, para ahorrar energía y descansar mejor.