En Eres Energía somos plenamente conscientes de que el sector eléctrico suele suscitar ciertas dudas entre sus usuarios, debido principalmente a su complejidad.
Así, en ocasiones se tiende a confundir conceptos que, a primera vista, pueden parecer similares o que, a pesar de tener una estrecha relación, hacen referencia a elementos totalmente independientes, como puede ser el caso de la necesaria diferenciación entre potencia y consumo de energía relativo a un contrato de suministro eléctrico de un inmueble.
Por eso, para evitar que puedas incurrir involuntariamente en este tipo de errores, hoy queremos aprovechar este espacio para explicarte a qué nos estamos refiriendo cuando hablamos de ‘término de potencia’ y ‘término de energía’, con el fin de que esta explicación pueda servirte de ayuda para entender mejor los conceptos incluidos en tu factura eléctrica.
Para comenzar, cuando se emplea el concepto término de potencia, se está haciendo referencia al coste que se refleja en tu factura de la luz como consecuencia de la potencia eléctrica que has decidido contratar y que, por tanto, se basa en un cálculo que, salvo modificaciones en la intensidad elegida o la tarifa fijada por la comercializadora eléctrica, estará asociado a un valor fijo, no relacionado con el consumo que se realiza.
Por tanto, dicho de otra manera, este término de potencia se podría considerar como el coste de la capacidad máxima en kW que tienes como usuario para utilizar tu instalación eléctrica con diferentes dispositivos de forma simultánea, en función de tus necesidades.
Por el contrario, el término de energía sí que se refiere al consumo efectivo que haces mensualmente, o en cualquier otro periodo de tarificación acordado con tu comercializadora eléctrica, y que, como es lógico, variará en función de tus necesidades energéticas específicas.
En base a ello, el consumo energético se mide en kWh, ya que dependerá del consumo realizado y el precio de la electricidad en cada momento del día o establecido previamente en la tarifa elegida, dependiendo de si has decidido acogerte a un contrato de suministro eléctrico con tarificación indexada o fija.