¡Hoy te mostramos el tercer invitado a nuestra auditoría! 🕵️♂️ el #3 es un aparato de uso ocasional, pero de consumo explosivo: ¡El Horno!
Aunque no esté encendido 24/7, el horno consume una gran cantidad de energía para generar calor intenso. Pero con el truco de ERI, puedes aprovechar su potencia para ahorrar:
💡 La Misión de ERI: El Truco del Calor Residual
– ¡Apaga Antes de Tiempo! Este es el consejo más potente. El horno sigue caliente mucho después de apagarse. Apágalo unos 5 a 10 minutos antes de que la comida esté lista y deja que el calor residual termine el trabajo. ¡Ahorro garantizado sin afectar la cocción!
– No Precalientes Si No es Crucial: Precalentar el horno consume mucha energía. Si no estás horneando bollería o algo que requiera precisión milimétrica, sáltate ese paso.
– Usa la Ventana del Horno: Evita abrir la puerta para mirar la comida. Cada vez que lo haces, la temperatura interior cae bruscamente y el horno necesita más energía para recuperarse. ¡Usa la luz interior!
¡La Auditoría de ERI ha terminado! 🏆 Ya tienes el control sobre el Frigorífico, la Lavadora y el Horno. Al aplicar estos 9 consejos, tu ahorro anual puede ser muy significativo.
Ahora que ya sabes dónde se va la luz… ¿quieres pagar menos por ella?
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